El desborde del río Mapiri en el Municipio de Guanay afectó a 660 familias de 12 comunidades indígenas del pueblo Leco. Los afectados piden ayuda a la Gobernación de La Paz, informó el alcalde Roger Tintaya.
Expresó que estas comunidades indígenas se encuentran muy preocupadas e inseguras, ya que temen otros desastres por las lluvias.
La riada sorprendió la madrugada del jueves pasado a los indígenas, quienes viven en la rivera, donde se registró daños en viviendas, sembradíos y la pérdida de animales.
“Hasta el momento no se ha realizado un conteo exacto, ya que necesitamos técnicos que realicen esta acción y a su vez podamos ver las pérdidas que se tiene en el Norte de La Paz”, dijo.
Los pobladores indígenas del pueblo Leco, viven mayormente de la agricultura, crianza de ganado y sus artesanías, y a causa de las riadas han quedado 660 familias damnificadas.
Explicó que la comunidad más afectada es la de Baraoumpampa, donde se contabilizó 27 viviendas destruidas por el agua. Hasta el momento hay algunas comunidades con las que no se pudo establecer contacto, ya que las vías también han sido afectadas por las riadas.
El Gobierno Municipal de Guanay ya declaró al municipio, como zona de desastre. El alcalde y la presidente del Concejo llegaron a La Paz para pedir ayuda a Defensa Civil y a la Gobernación.
GOBERNACIÓN
Por su parte el director de Alerta Temprana de la Gobernación de La Paz, Luis Alcoreza, dijo que se dispuso maquinaria pesada del Sedcam para atender las emergencias de las vías en el sector de Guanay y Mapiri.
Dijo que hasta en el momento existe personal autorizado en estos sectores para que los trasportistas y pobladores puedan dirigirse a sus destinos sin mayor problema.
Recordó que hace aproximadas dos semanas el municipio de Mapiri, ubicado en el norte de La Paz, se declaró zona de desastre, porque la madrugada del 25 de diciembre las lluvias provocaron la crecida del río Tarapo, que se llevó parte de un puente y dejó aisladas a más de 20 comunidades. Además, causaron un alud en el cerro de Santa Rosa, con el saldo de una menor fallecida y ocho casas destruidas.
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