Granizo y lluvia arrasan cultivos

Dos horas y algo más degranizo y lluvia, entre las 18:00 y 20:00, bastaron para que casi el 100% de la producción agrícola de unas 300 familias del municipio de Zudáñez desapareciera como el agua entre las manos.

La tarde del martes, el alcalde de ese municipio, Silverio Cuellar, estuvo en la comunidad de Sayanchaca y observó que los sembradíos de papa estaban en flor y junto a los cultivadores vaticinaron que les esperaba una “muy buena producción”; sin embargo, con la oscuridad de la noche llegó otra penumbra más intensa: del cielo cayeron grandes granizos, más grandes que las pelotas de pimpón, casi iguales al tamaño de las pelotas de raqueta. Luego, una torrencial lluvia.

Fue un desastre que les recordó lo que había sucedido en enero pasado, pero mucho mayor, afirma Cuellar, que al día siguiente (ayer, miércoles) regresó a la comunidad de Sayanchaca y se encontró con un tendal de cultivos de papa y maíz, que más parecían arrasados por tropas de ovejas, vacas y burros que por la lluvia que tanto esperaban los productores por estos días.

La gente está llorando, sostiene acongojado el Alcalde de Zudáñez, al nombrar lentamente, como niño que cuenta los números con los dedos, todas las comunidades que fueron afectadas la negra noche del martes: Marcani, Sayanchaca y Aliso Mayu, que están en una parte alta. “Más abajo”, están los cultivos de las comunidades de Sunchu Pampa, Coilolo, Sauces, Abra Cancha, San Antonio, Tarajchi y Capilla Llave que fueron destruidos por la riada.

- ¿Se podrá recuperar algo?
- No, no. Ha habido una pérdida del 90%, contesta Cuellar al señalar que los técnicos de la Comuna se encuentran realizando el levantamiento de información, para luego gestionar ayuda en la Gobernación de Chuquisaca y en el Gobierno nacional.
La desgracia –no se puede llamar otra cosa cuando uno se queda sin casi nada para vivir– se ensañó con cerca de 300 familias, que además de ver caer esperanzadoras plantas de papa y maíz, vieron morir cuatro cabezas de ganado vacuno arrastradas por el río. Las más de dos horas desesperantes de granizo y lluvia también tendieron el oscuro manto de la muerte en “gallinitas y ovejitas”.
¿Cuántos son? Qué importa, si de eso depende la alimentación de niños y ancianos, que son los que más se quedan en las comunidades.
“La gente está llorando al ver esa pérdida”, manifiesta el Alcalde de Zudáñez. “Mire lo que ha hecho la lluvia en casi dos horas”, agrega la autoridad a este diario vía telefónica sin percatarse que cientos de kilómetros separan a ambos interlocutores, pero quien sabe consciente de que las fotografías del desastre están circulando por las redes sociales ante miles de ojos.
- ¿De qué van a vivir?
- Esa es la preocupación, contesta Cuellar al informar que ayer el Concejo Municipal de Zudáñez emitió una resolución que declara zona de emergencia, con la finalidad de que se destinen los recursos suficientes para reactivar los cultivos. La distribución de semillas para una nueva siembra es una opción real porque aún se está a tiempo, afirma.
Además, justifica, “la gente está acostumbrada a estar en el terreno. Para ellos es su vida su sembradío y animalitos”.

EL RÍO SE TRAGA SEIS MEZCLADORAS
Para la arrasadora fuerza del agua estos daños no fueron suficientes. También se ensañó con la maquinaria de una empresa que construye la represa Pitulillo. Se llevó seis grandes mezcladoras y ni la reacción de decenas de obreros que estaban cerca del lugar pudo con la velocidad del río. Por fortuna, según el Alcalde de Zudáñez, no hubo desgracias personales.

REPORTAN DAÑOS EN TOMINA E ICLA
Con la granizada y riada de la noche del martes y madrugada del miércoles, también se vieron afectadas algunas comunidades de los municipios de Icla y Tomina, colindantes con Zudáñez.

El alcalde de Tomina, Germán Sifuentes, dijo que la torrencial lluvia y granizada alcanzó a la comunidad de Thuru Mayu que está en el límite con el municipio de Zudáñez.

En ese sector preliminarmente se contabilizaron diez familias damnificadas que perdieron sus cultivos de papa y maíz, informó Sifuentes al manifestar que en la mayor parte de las comunidades de su municipio, el gran problema es la sequía.

Por otra parte, el municipio de Icla también sufrió los efectos del fenómeno natural y sus autoridades se encontraban cuantificando los daños en más de una comunidad.